Política y redes sociales ¿Un nuevo modelo en la administración?

He leído esta semana dos informes muy interesantes, aunque a priori sin un nexo directo, sobre el papel de los políticos en las redes sociales y sobre la necesidad de un nuevo modelo en la administración pública, más cercano a los ciudadanos y que sepa aprovechar las nuevas tecnologías.

En el primer caso, la consultora de Geomarketing y Comunicación Intelligence Compass recoge una encuesta realizada en las redes sociales, cuyas principales conclusiones son:

• La valoración de las redes sociales por parte de los políticos es notable, especialmente como fórmula para llegar al ciudadano. Sin embargo, muy pocos son los que ya utilizan esta herramienta.
  

• Los usuarios consideran los Social Media igualmente provechosos para acercar la política al ciudadano pero huyen de relacionarse con políticos, lo que denota la enorme distancia actual que existe entre política y ciudadanía.

En la segunda de las referencias que citaba al principio, Jordi Graells defiende el uso de las nuevas tecnologías como fórmula para reinventar las organizaciones, en particular la Administración.

En ella se habla de conceptos muy novedosos, si nos atenemos tanto a su aplicación en la mayor parte de organismos públicos como a la percepción que tenemos los administrados. Se citan, entre otros:

• Un nuevo modelo que se comprometa a generar valor para la ciudadanía.
  

• La necesaria implicación de todos en la Administración y el Gobierno y la responsabilidad de ambos en hacer partícipes a los ciudadanos en la definición y diseño de sus actuaciones, con el propósito de ganar en eficiencia, mejorar la percepción de lo público y evitar achacar todos los males a los administradores de la cosa pública.

• La tecnología puede ser la herramienta que permita una mayor transparencia tanto en los datos públicos como en la gestión.
  

• Es preciso impulsar las estrategias de colaboración en la gestión del conocimiento.

• Hay que avanzar hacia una gobernanza abierta, con una Administración próxima, sencilla, proactiva, innovadora, transparente y que incentive la participación y la colaboración.

• Promover un liderazgo diferente, personalizar los servicios o impulsar una red de profesionales en la Administración.
  

Todo un reto y una inspiración para los que nos dedicamos a trabajar con políticos en el ámbito de la Administración Pública.