Comunicación interna y talento, un ejemplo que cambiará tu forma de ver las cosas

¿Es posible trabajar en una empresa donde los errores se incentivan, disculpan y agradecen? ¿Donde cada empleado elige en qué proyecto trabajar? ¿Dónde no existen jerarquías y la evaluación de tu trabajo la realizan tus propios compañeros?

Lo que vas a leer a continuación no son planteamientos teóricos ni declaraciones de buena voluntad.

Son los hábitos de trabajo de una empresa estadounidense, Valve, que se dedica a realizar videojuegos, pero que merecería un estudio detenido respecto a cómo se plantea el ambiente laboral, la atracción del talento y la búsqueda continua de la excelencia. Una empresa, que como Zappos, debería dejar de ser marginal en el modo en el que afronta su gestión empresarial y convertirse en ejemplo y guía de otras muchas.

Todas la información proviene del documento que tienes al final de este artículo, el manual de acogida que la propia empresa difunde entre sus nuevos empleados y cuya referencia obtuve de Juan Luis Polo (desde aquí mi agradecimiento), en el marco del Influence One, la excelente jornada de comunicación a la que tuve ocasión de asistir el pasado mes de marzo.

Aquí, algunas claves:

Jerarquía frente autonomía. Control frente flexibilidad

La jerarquía es buena para entornos predecibles [si existe alguno] y repetitivos. Simplifica la planificación y facilita el control de un número amplio de personas.

Pero, si eres una empresa de entretenimiento que trata de contratar a las personas más inteligentes, innovadoras y talentosas, no puedes sentarlas en una mesa y decirles lo que tienen que hacen. O sí, pero acabarás con el 99 % de su valor.

Valve tiene un fundador y presidente pero no es tu jefe. Esta empresa está en manos de sus empleados, que tienen la posibilidad de elegir los proyectos en los que quieren trabajar y los productos que quieren crear.

Tu misión en la empresa

Decidir en lo que trabajas puede ser uno de los aspectos más difíciles de tu trabajo en Valve.

No te contratamos para ocupar un puesto de trabajo específico sino para estar constantemente valorando cuál es el trabajo más valioso que puedes realizar.

Decisiones, siempre en beta

No nos fiamos de nuestras predicciones ni de nuestro conocimiento, sobre todo cuando nos vemos en una entorno nuevo, comprobamos cada una de las decisiones que tomamos. Es mucho más seguro.

Equipos multidisciplinares donde todos aprenden de todos

Frente a lo que suele ser habitual, en Valve se trabaja todo el tiempo en un equipo multidisciplinar, junto a expertos creativos, legales, financieros, psicólogos… ¿Y qué garantiza? Afrontar los retos con una mentalidad mucho más abierta y rica y aprender enormemente en cada proyecto.

¿Horas extra?

En ocasiones, tenemos que trabajar alguna hora extra en proyectos que lo requieren. La mayor parte del trabajo extraordinario indica, sin embargo, un error en la planificación o en la comunicación. Y si ocurre, es algo que necesitamos valorar y corregir.

Un buen equilibrio entre vida laboral y familiar es básico.

Algunas ventajas laborales

Fruta fresca, barra libre de café, masajes en la oficina, lavandería, gimnasio… Relájate y disfrútalas, nadie te va a juzgar por ello.

 Nunca se ha despedido a nadie por cometer un error

Es básico ofrecer la libertad suficiente para equivocarse. No podemos esperar mucho de cada persona si la castigamos por los errores.

Aunque siempre hay algunos aspectos sobre los que no deberíamos fallar: no escuchar a los clientes o repetir los errores.

Inteligencia colectiva

Hemos aprendido que nuestra habilidad conjunta, como empresa, para enfrentarnos a los desafíos, aprovechar las oportunidades y responder a las amenazas es mucho mayor cuando lo hacemos desde el colectivo.

Evaluación continua, por parte de tus propios compañeros

Uno de los métodos de evaluación de la empresa es realizar entrevistas personales y anónimas sobre el desempeño, la capacidad, la actitud… de tus propios compañeros.

Y con unos papeles que cambian y se adaptan a las circunstancias

Los roles son fluidos en Valve. Nadie tiene título, todo el mundo es diseñador… y analiza, mide, programa, evalúa.

De hecho, en los créditos de cada juego que realizan solo sale un listado de personas, por orden alfabético. Nada de jefes de equipos, diseñadores jefes, directores…

Sin olvidar el sueldo

Y todo ello con unos sueldos notables, que les permiten atraer el talento y mantener una productividad por empleado superior a empresas como Google, Amazon o Microsoft.

Pero no es la empresa perfecta

En el propio documento se recogen aspectos en los que Valve necesita mejorar:

• Ayudar a los empleados a encontrar su camino (de ahí, quizá, este manual)
• En asignar personas que guíen y apoyen las labores de los recién llegados, el llamado mentoring
• En favorecer el flujo de información en el interior de la empresa
• En avanzar escenarios más allá de unos pocos meses…

Y ahora, que se pronuncien aquellos a los que no les gustaría trabajar en un entorno similar. Los que piensen que no incentiva la motivación, el crecimiento profesional, el compromiso, la mejora del clima laboral, la productividad, los resultados…

Y que no lo hagan, por favor, los responsables de muchas empresas que proponen y ejecutan, diariamente, medidas en la dirección contraria 😉

Valve. Handbook for new employees, PDF (56 páginas) Una aventura para saber qué hacer cuando no hay nadie que te diga lo que tienes que hacer. 2012